(Imagen tomada por Eduardo Rodríguez – @eduardo.raw01)

Eliminatorias rumbo al Mundial de la FIFA 2026 | Panamá 2-0 Guyana

Empezó la búsqueda hacia la redención después de una fallida clasificación a la pasada Copa Mundial, que de seguro habrá dejado más lecciones tanto para el cuerpo técnico como para los jugadores que esta vez se encuentran ante una nueva oportunidad que en el papel tiene menos escollos, una percepción que puede ser traicionera.

Panamá parte desde la segunda ronda con el objetivo de avanzar a la tercera, ya sea como primero o segundo del grupo tan pronto concluya esta ronda, pero tiene que dar pasos seguros, dar golpes convincentes sobre la meza, y demostrar por qué hoy en día es vista como la tercera selección nacional de la zona, algo que la hace ver como el rival a vencer en este camino lleno de oportunidades para todos.

Guyana, una selección caribeña de bajo perfil, en las palabras de su entrenador Jamaal Shabazz, había dejado clara su intención de competir, aunque diera elogios de sobra al juego que ha venido desplegando Panamá bajo el mando de Thomas Christiansen, tanto así que lo ven como un modelo a seguir.

Resultó ser que el inesperado estudiante se convirtió en un retador serio al ver como a Panamá hasta cierto punto le costó sacar la victoria en casa, mostrando algunos problemas recurrentes que todavía no han sido del todo subsanados como la falta de contundencia.

El problema se manifestó desde los primeros compases del encuentro, donde Panamá con la tenencia de balón proponía con un juego directo que aprovechaba el frío comienzo de los defensores de Guyana, donde Cecilio Waterman tuvo la primera, pero el achique del guardameta Quillan Roberts le ganó el duelo al ariete panameño en apenas 6 minutos.

Cinco minutos pasaron y la segunda ocasión de Panamá dejó a todos con la boca abierta en una acción generada por Ismael Díaz desde la izquierda, luego pisando área con espacio para definir prefirió dejársela a Eric Davis que llegaba por izquierda, pero el remate de primera intención terminó desviado, salvándose Guyana de manera increíble.

Los guyaneses también propusieron, de hecho, fueron los primeros en rematar en el encuentro, aunque sin puntería, solo que después de ese primer intento sus llegadas fueron de mayor atención con un inquietante Omari Glasgow que exigió a Luis Mejía en una necesaria salida para evitar que definiera, y luego en una acción a balón parado donde cabeceó Glasgow buscando a Curtez Kellman que no alcanzó a cerrar en el segundo palo.

Waterman encendería una nueva alarma en el departamento médico justo después de media hora quedando sentido en el terreno quejándose de una molestia muscular, la misma que lo apartó de las canchas hace unos meses con el Alianza Lima, y que esta vez se sumaria a otro problema a sabiendas de la baja extensa del defensa panameño Andrés Andrade, y las dudas del también zaguero Fidel Escobar, por lo que ahora Waterman en zona de ataque ya pondría en apuros a Thomas Christiansen.

José Fajardo ingresaría por Waterman, el ataque de Panamá se mantendría con la alta propuesta presentada, solo que Guyana comenzaba a defender mejor y a atreverse a ir hacia adelante, sobre todo con Stephen Duke-McKenna, el número 8, que cuando la tenía conducía y hacía que su equipo avanzara.

Adalberto Carrasquilla generó una de las mejores ocasiones de gol antes de finalizar la primera parte al ver adelantado al guardameta Roberts y sacar un remate distante que hizo que el balón se estrellara contra el travesaño.

Guyana se iría al descanso con un empate favorable, en cambio Panamá iría insatisfecho, pero a la vez un poco asombrado de ver que el partido se le podía complicar en ambos lados de la cancha.

Christiansen no dudó en hacer más modificaciones, optó por deshacer la zaga de cinco defensores, y optó por poblar más el mediocampo para tener más control del partido, además de profundidad con el ingreso de Cristian Martínez y José Luis Rodríguez.

Quillan Roberts con otro achique dejó con las ganas a Panamá, esta vez a José Fajardo, pero pensar que Guyana aguantaría todo el partido era poco probable, y Panamá conseguiría el primer tanto al minuto 62 con una gran definición de Cristian Martínez que dentro del área espero un servicio diagonal colocado por Adalberto Carrasquilla, y a espaldas pudo controlar, girarse y definir para el 1-0, aunque a primera vista parecía dudosa su posición al momento del pase.

En poco tiempo llegaría el 2-0, también con definición de un recién ingresado, José Luis Rodríguez que pudo rematar con potencia un balón servido por Édgar Bárcenas en una gran acción individual para llegar a línea de fondo, escaparse y servir el pase en diagonal retrasada.

Con la ventaja Panamá llevó a que Guyana se defendiera más, ya que la posesión y el desarrollo del partido no había a simple vista manera de que no fuera del lado rojo, y así llegaron otras ocasiones, dos con César Blackman que había ingresado en la segunda parte.

El campeón de la liga eslovaca vio como su primer disparo pasó al lado de la base del segundo palo, y en otra acción ya sobre la reposición su remate fue repelido por el paral izquierdo.

Panamá tendría que conformarse con los dos goles y con lo más importante que son los tres puntos, antes de su próximo juego ante Montserrat.

Datos:

• Debut en eliminatorias para Eduardo Anderson y Jovani Welch
• Panamá en eliminatorias no pierde ante selecciones caribeñas desde el 24 de marzo de 2017 ante Trinidad y Tobago
• Primer gol para Cristian Martínez con la selección nacional de Panamá; primer gol de José Luis Rodríguez en eliminatorias mundialistas con la selección nacional de Panamá.

Claves del partido:

Un equipo que no salió a entregarse: Guyana jugó como un equipo que tenía cierta noción de cómo complicarle el partido a Panamá, sabiendo que no podían igualarlo en cuanto a la tenencia del balón, pero con la seguridad de que tendrían momentos para poder atacar al conjunto panameño.

Fue más lo que le tocó defender a Guyana, pero no fue una derrota bajo un margen amplio lo que les permite tomar mayores riesgos y con cierta confianza para los partidos que vienen.

Panamá no quitó el pie del acelerador, aunque no estuvo fino: Aunque por momentos no parecían estar conectados en su juego, no dejaron de atacar. El partido lo pedía, las condiciones eran favorables para el juego panameño, y eso hizo que el rival se preocupara mucho más por defender, por lo que Panamá tenía que insistir hasta que llegaron las ayudas necesarias en el frente de ataque de Panamá.

Cambios de impacto: Los ingresos de José Luis Rodríguez y Cristian Martínez dieron como resultado el gol, dándole a Panamá lo que le faltaba desde un poco más de profundidad con mejor posibilidad de llegada, y un control del mediocampo con una postura más ofensiva.

Por: Samuel McCollin – Redacción Bitácora Deportiva