(Imagen cortesía de Prensa LPF – AES Sports Images)
Tauro y Árabe Unido se enfrentan en la ida esta noche
Es la época que muchos esperan en el fútbol panameño, seguramente la época donde se voltean la mayoría de las miradas hacia la cancha, los televisores, o hacia las nuevas tendencias de información, con tal de saber cómo se vaya dando una de las etapas más emocionantes del semestre.
Dos equipos llamados a llegar a estas instancias y que de no hacerlo es un fracaso innegable, protagonizarán una de las llaves de semifinales, con ciertas cosas en común y ciertos temas pendientes que atender.
Tauro FC y Deportivo Árabe Unido, los equipos con las vitrinas más llenas en el fútbol panameño, se enfrentan a dos duelos para buscar lo que rescate su temporada de altibajos, en la que a su inicio vio como estos dos equipos se peleaban para no quedar últimos y que ahora acercándonos al cierre de temporada, se disputan el cupo a la final, cosa que han podido obtener al corregir su andar con la llegada de nuevos entrenadores y la atención que pusieron sus jugadores a la vergüenza deportiva que fue poco tolerable por sus aficionados.
Al Tauro FC le tocará abrir otra semifinal con el deber de terminarla en Colón, teniendo a su favor el fresco recuerdo de haber apagado las esperanzas del Árabe Unido, en las semifinales pasadas, precisamente en Colón, cuando aquel que había sido héroe para el Árabe Unido, se convirtió en su verdugo vistiendo la camiseta albinegra, Enrico Small, y quien se encargo en este semestre de anotar el gol que le daba la clasificación a los de Maldonado, eliminando al Alianza en los playoffs.
Para el Deportivo Árabe Unido es más que una oportunidad para el desquite, pues en los últimos dos duelos decisivos ante el Tauro FC, se han tenido que llevar la dolorosa derrota, tanto en una final, como en las pasadas semifinales, lo que se suma a un total de once enfrentamientos entre el 2017 al 2018, donde solamente en uno de ellos el Árabe Unido pudo conseguir victoria (sin tomar en cuenta la del 2-0, en la pasada vuelta se semifinales, que culminó 2-2, en tiempos extras).
La jerarquía es algo que desborda entre dos instituciones que han atendido a esa ambición competitiva, quedándose a un paso de satisfacerla internacionalmente, ya que ambos conjuntos vienen de caer en semifinales de la Liga CONCACAF, arruinándose la posibilidad de disputar una final panameña en el segundo torneo internacional de clubes, más importante de la zona.
Los taurinos con la llegada de Sául Maldonado han desplegado un fútbol que potencia mucho lo que son sus facultades ofensivas, no por gusto acabaron siendo el equipo que más goles anotó durante la ronda regular, con 33 goles en 18 partidos, de los cuales 8 han sido marcados por Edwin Aguilar y 7 por Enrico Small en esa instancia del torneo.
Con el entrenador uruguayo, la posesión de la pelota, los desmarques de sus atacantes, y el balance que puede darle su zona de volantes, han sido muy importantes en el desenvolvimiento del equipo, teniendo una libertad ofensiva que prácticamente hace que el balón permanezca por más tiempo en terreno contrario, dado a los jugadores habilidosos que tienen.
Pero como todo equipo, tiene ciertos puntos a corregir y que pueden ser un talón de Aquiles, como es la respuesta del equipo ante los contragolpes, que es donde le han hecho mucho daño, por cómo el equipo tiende preocuparse más por mantener metido al rival en su propia cancha, que por cómo ellos pueden quedar parados ante un balón que pierdan en ataque.
Árabe Unido sin hacer tanto ruido supo tomar la responsabilidad de poner a flote la nave, zarpando en turbulentas aguas de un equipo que estaba decepcionando y que tuvo que tomar decisiones hasta en los momentos menos indicados para algunos, como fue el cambio de la dirección técnica cuando el equipo recién iba a disputar semifinales en la Liga CONCACAF, a la vez de que en la Liga estaban en el último lugar.
La salida de Carlos Ruiz se debió a resultados, pero no a divisiones dentro de lo grupal, sino que los resultados no respaldaban la continuidad de Ruiz al mando del equipo.
El cambio de dirección técnica tuvo un buen efecto en el equipo, con rachas positivas y hasta que fueron sacando victorias en duelos directos que les permitieron adueñarse del segundo lugar, viniendo de ocupar un quinto lugar en la antepenúltima fecha.
Con José Ricardo Pérez, el equipo despertó su hambre ganador, encontrando alternativas también en su plantel de reservas, en varios puestos dentro del campo, que cumplían con el fin que era sumar tres puntos y con un juego que iba en mejoría.
Para este encuentro de ida que se jugará en el estadio Rommel Fernández, el equipo colonense no contará con los defensores, Roberto Chen, ni José Garibaldi, debido a acumulación de tarjetas amarillas.
El problema de las amarillas puede agravarse para el Árabe Unido en la vuelta, que en caso de ver una amonestación en la ida, ya sea Jonathan Mosquera, Rolando Algandona, Luis Pereira o Leslie Heráldez, se perderían el partido de vuelta, situación que solo podría afectar en el Tauro FC, a Enrico Small, en caso de que sea amonestado.
El árbitro designado para este partido, es John Pitty, asistido por Gabriel Victoria, Moisés McKenzie, y como cuarto árbitro, Albis González.
Por: Samuel McCollin – Redacción Bitácora Deportiva | Twitter: @SamuelMcCollin
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