El ADN ganador ante la estrategia rescatadora

El ADN ganador ante la estrategia rescatadora

(Imagen archivo cortesía de Prensa LPB)

Correcaminos de Colón, y Caballos de Coclé la última batalla por el título.

El baloncesto panameño no hay que verlo solo como una fiebre, porque las fiebres van y vienen, sino como una parte existencial del deporte panameño, una parte que estaba desactivada, pero con cambios notables desde quienes dirigen esta disciplina en Panamá, se le ha vuelto a dar al menos ese sitio de notoriedad que necesita, y más con una Liga Profesional, que tanto extrañábamos.

Concluyéndose esta segunda temporada de la LPB, está el partido más esperado, su final, y que en esta ocasión tiene componentes de sobra que la hacen una final imperdible para cualquier panameño amante del baloncesto, y es que tendrá como protagonista, al actual campeón defensor, y uno de los equipos revelación de la pasada Liga de Las Américas, los Correcaminos de Colón, y a un equipo que milagrosamente creyó y aprovechó la mínima oportunidad que tuvo para llegar hasta esta fase, los Caballos de Coclé, siendo rescatados por la experiencia y el deseo ganador de un entrenador muy conocido, David Rosario.

Para los colonenses, esto de estar en finales se le está convirtiendo en una celebración anual, o de semestres, porque lo han hecho así en el fútbol, también en el baloncesto, en fin, una provincia que está gozando de una década deportiva impresionante, pese a sus grandes limitantes.

Coclé por su parte, ha podido contar con la visión de una ex estrella de las Grandes Ligas, Carlos Lee, quien ha sabido invertir parte de su dinero en administrar franquicias originarias de su provincia, y que han podido mantener cierto nivel de competitividad, como ha sucedido con los Caballos de Coclé, tanto en PROBEIS, como ahora en la LPB.

Los Correcaminos de Colón quieren seguir añadiendo capítulos privilegiados en su historia como franquicia del baloncesto de la provincia colonense, que siempre es recordada por unos antiguos, Navieros de Colón, quienes ahora su espacio lo comienza a ocupar de forma especial bajo esta reestructurada liga, el equipo de los Correcaminos, que es el máximo exponente del baloncesto en la provincia de Colón, y hasta ahora, del baloncesto panameño, detrás de su selección nacional.

El equipo de Casimiro Laguna ha hecho lo posible de no desperdiciar las experiencias adquiridas, y pese a lo difícil que ha sido este campeonato, a lo largo los Correcaminos se afianzaron y demostraron por qué cuentan con ese perfil ganador, pese a que en la mayoría del campeonato con contaron con Jaime Lloreda, y Danilo Pinnock Jr., quienes han sido pilares del éxito logrado en el 2015, y en el inicio del 2016 en la Liga De Las Américas.

Aunque las ausencias de estos dos antes mencionados, no han coincidido, el equipo ha sabido mostrar un buen nivel teniendo solo a Lloreda en un momento, o a Pinnock Jr, como fue el caso de estos recientes encuentros, a sabiendas de que Lloreda se fue al baloncesto uruguayo, y que hasta hoy es duda para disputar o no la final, dependiendo de que si haya llegado el permiso o no, de parte del Hebraica y Macabi.

La defensa ha sido el mayor enfoque de los Correcaminos de Colón en este 2016, donde han podido aprender de quien había sido su técnico solo para el período de Liga De Las Américas, Marcelo Signorelli, y a partir de ese trabajo ha quedado un molde con el cual han intentado permanecer, y que les ha hecho llegar a otra final.

Con un Danilo Pinnock Jr. dentro del plantel que dirige Casimiro Laguna, el equipo ha tenido una mente, un núcleo de perspicacia que le ha servido para resolver dificultades, romper defensivas, y ponerle algo de agresividad y viveza en el buen sentido de la palabra, al equipo colonense, con el buen acompañamiento de un Johan Haití, refuerzo cubano que se ha podido mantener en el equipo, Tyler Gaskins, que a la ofensiva ha podido ser de gran apoyo para un Isaac St.Rose, así como Aníbal Salazar, base que da su aporte significativo en períodos requeridos, y un Yosimar Stewart, que junto a Jaime Lloreda, han hecho que la lucha debajo del aro sea muy exigente para cualquier rival, siendo las principales referencias de un plantel que cuenta con otros elementos jóvenes y algunos con más recorrido.

Para los Caballos de Coclé, la llegada de David Rosario ha sido prácticamente la principal razón por la que están en una final, teniendo a un entrenador que ha podido rescatar lo que dejaba Víctor Macías, encontrando los problemas que tenía la plantilla, y solucionándolos desde la propuesta brindada a todos desde el primer día que llegó, bajo una situación de emergencia, y con pocos partidos para poder causar el efecto que algunos no se esperaban, y clasificándose a duras penas con una foja de 7 triunfos y 8 derrotas en la cuarta posición, por una pequeña diferencia de puntos.

La experiencia es importante en los Caballos de Coclé, pero con respecto a los Correcaminos de Colón, la experiencia no lleva el mayor peso en el plantel, porque sus principales motores han sido jugadores jóvenes que con su alto nivel competitivo, han conseguido en David Rosario lo que necesitaban para funcionar como un conjunto, dígase el caso de Anell Alexis, y CJ Rodríguez, jugadores que acumulan muchos puntos, o una buena cantidad de puntos, así también asistiendo a otros complementos ofensivos, como el caso de Adalberto Rojas, que hoy puede decir con mucha felicidad, de que ha podido terminar el torneo, no como en el 2015 que por una terrible lesión no pudo continuar, y unos jóvenes como José Montenegro, y José Peña, que para ellos la edad no ha sido impedimento para poder estar a la altura de lo que se les exige en esta liga.

Todo esto ha servido para levantar a otros jugadores de mayor experiencia como Miguel Gotti, Akbar Lawson, Mauricio Watson, Joel Tesis, entre otros que cuando aparecen en la pintura, ayudan a mantener el propósito de cada juego, donde ha quedado demostrado por Rosario que tiene pocos titulares fijos en este equipo que se ha hecho fuerte con lo que tiene, ya que han cerrado la temporada sin necesidad de contar con su refuerzo, ni tampoco con Carlos Johnson que debido a unos asuntos personales, lastimosamente no ha podido estar con el equipo en este cierre de torneo.

Ese perfil ganador con el cual cuenta Correcaminos de Colón, se verá desafiado ante la experiencia de David Rosario, que ha estado constantemente en altos niveles de competencia, no solo en clubes, sino también en selecciones nacionales, conociendo bien a los dos pilares de los Correcaminos de Colón, y con un amplio recurso de opciones para poder desafiar a los campeones, queriendo impedirles que sean ellos los que pongan otro título dentro de sus vitrinas.

En los duelos entre sí, disputados en este torneo, los Correcaminos de Colón le ganaron dos de tres duelos a los Caballos de Coclé, pero con la curiosidad de que en ninguno de esos tres encuentros estuvo David Rosario, ya que llegó a Panamá desde el 25 de septiembre.

La Copa Fermín Octavo “Tavo” Castañedas, de la LPB tendrá un espectacular encuentro para definir quién será que la levante, tras el partido que deberá iniciar desde las 8:00 pm.

 

 

Por: Samuel McCollin – Redacción Bitácora Deportiva | Twitter: @SamuelMcCollin

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