Previa: C.A.I. vs FC Motagua – vuelta de cuartos de final de la Copa Centroamericana
El Club Atlético Independiente pasó con buenas calificaciones dos pruebas difíciles en Honduras, una más complicada que la otra, pero ahora le toca terminar el trabajo figuradamente en casa donde lo que se percibe es un ambiente alentador que quizás le genera esa tranquilidad que necesita para equilibrar los niveles de presión que pueden estar rondando las cabezas de todo su plantel.
El Motagua está acostumbrado a estas situaciones, sabe cómo jugar en estas instancias, recordando por qué es uno de los clubes más exitosos del fútbol hondureño, pero en esta ocasión se dio cuenta que su jerarquía no le basta para superar a un rival que ha afrontado el torneo sin complejos, y para rematar con muy buen fútbol.
Para CAI la alegría ha venido entremezclada con tristeza y preocupación, lo que nos hace recordar el lamentable fallecimiento del defensor Gilberto Hernández, líder de su zaga, la lesión del refuerzo colombiano Breiner Paz, la duda que hay sobre el volante Ángel Valverde, la ausencia del lateral derecho Jean Montenegro, como las principales razones que han trastocado el funcionamiento del equipo en la cancha, pero principalmente en el aspecto emocional que es la base de todo.
A nivel emocional el CAI ha sido fuerte; los resultados, su forma de jugar, y lo que contribuye cada integrante del plantel sustentan esa fortaleza que les ha hecho encabezar la conferencia oeste en la liga, y llegar con mejores posibilidades a encarar esta vuelta de la competición centroamericana frente a un rival dificilísimo.
La manera en que se obtuvo el 1-1 en la ida nivela la balanza para el compromiso decisivo, donde el Motagua cuenta con el regreso del lateral izquierdo Ricky Zapata, no así con el de su líder en defensa, Marcelo Pereira, y llega con más ritmo uno de los mejores jugadores de la fase de grupos, Yeison Mejía, que vio acción en la ida, pero contrarrestado en gran parte del duelo.
CAI cuenta de regreso con uno de sus jóvenes delanteros, pero de más recorrido, Anthony Stewart quien ya marcó en este torneo, además sus nuevos refuerzos han contado con más partidos de ritmo competitivo con el cual adaptarse al estilo de juego del equipo, tal es el caso del volante Misael Acosta, el atacante Kevin Meneses, y el central Abdiel Sealy.
En la ida el CAI propuso, pero fue precavido jugando de forma inteligente, sin embargo, para esta vuelta se espera que llegue a exigirle más al Motagua con más elementos lanzados hacia el ataque.
Al contragolpear en Tegucigalpa el CAI lo hizo bien, pero en el último tercio eran las individualidades las que complicaban a un Motagua que se dio cuenta que no podía comprometer la cantidad de jugadores en retroceso defensivo, porque la habilidad de Jorge Serrano fue un problema, y Carlos Small fuera del área también lo fue siendo uno de sus mejores partidos desde otra función como lo era cuidar el balón a espaldas del arco, y asociarse con quienes se presentaran.
El buen estado físico de los jugadores del CAI les ha permitido cubrir diferentes zonas del terreno con mucha premura y orden, haciendo que sus extremos se conviertan en una especie de carrileros, pero que a su vez salían en velocidad cuando el equipo desarmó al Motagua.
En donde sí se vio endeble el CAI y para sorpresa de muchos fue en el juego aéreo con las veces que el Motagua ganó en su área las posibilidades de remate, en especial con el argentino Agustín Auzmendi, un jugador que no solo espera para finalizar, si no que tiende a crear posibilidades para sus compañeros estando cerca del área.
Franklin Narváez, quien ha sido el primer director técnico panameño en hacer que un club panameño supere la fase de grupos, no oculta el hecho de que su equipo ha seguido trascendiendo, algo que ha podido mantener en su segundo periplo donde ha conseguido el bicampeonato, pero que ahora quiere que el nombre del equipo sea escuchado e identificado a nivel regional.
“No hay presión, la mentalidad es la misma, queremos seguir avanzando, lograr cosas. Jugar de tú a tú con los llamados grandes”, dijo el estratega en conferencia de prensa junto al defensa Jefferson Murillo, la cual puede ser vista aquí:
Un más calmado César Vigevani y consciente de lo que representa el partido de vuelta una vez superada la frustración manifestada en la ida, reconoce los peligros que posee su rival, y no siente que el cotejo por el desenlace vaya a cambiar mucho.
“Creo que va a ser una revancha muy similar, son dos equipos muy parejos, se pierde por mínimos detalles, es una cancha similar a la nuestra, en cuanto al juego no tendría que cambiar nada”. expresó en conferencia de prensa junto al delantero Lucas Campana, la cual puede ser vista aquí:
El Motagua ha visitado Panamá en cuatro ocasiones, pero su historial competitivo ante clubes panameños se remonta a la primera década del 2000, solo que la mayoría de esos duelos fueron en otras sedes bajo formatos distintos.
El “Ciclón Azul” ha ganado en una de sus cuatro visitas, pero no ha conseguido ganar en las tres últimas, aunque en su más reciente, el año pasado, ganó la llave ante Tauro en penales por la Liga Concacaf.
CAI que ha tenido protagonismo en la anterior Liga Concacaf, no consigue meterse en el gran torneo (Champions) desde 2019, e intentará alcanzar ese objetivo en este primer intento que los mantendría en carrera aspirando por el título centroamericano.
A las 9:00 pm en el Rommel Fernández se dará el pitazo inicial de este compromiso de vuelta, cuya terna arbitral será guatemalteca: Bryan López como árbitro central, Luis Ventura como primer asistente, Juan Tipaz como segundo asistente, e Ignacio Fuentes como cuarto árbitro.
Por: Samuel McCollin – Redacción Bitácora Deportiva | Twitter: @SamuelMcCollin
Leave a Reply