(Imagen cortesía de Concacaf)
Crónica | Concacaf W – Grupo B: Costa Rica 3-0 Panamá
Mal comienzo para la selección nacional femenina de Panamá en el que además del resultado, la imagen que mostró el equipo fue decepcionante para lo que se esperaba en este debut ante una Costa Rica que elevó su nivel para estar listas ante esta nueva oportunidad de clasificarse a una copa del mundo.
Ticas y canaleras se enfrentaron en el estadio BBVA, la majestuosa casa del Monterrey CF, y las Rayadas de Monterrey, en el que era uno de los duelos más esperados del grupo b, y que a simple vista para muchos era el que tendría mayor incidencia en la carrera por uno de los cupos directos al mundial dentro de este grupo.
Ignacio “Nacho” Quintana optó por un 4-3-3, queriendo que Panamá contara con volumen de ataque por los costados, y por más tenencia de balón, frente a un 4-2-3-1 que presentaba Amelia Valverde.
Los primeros instantes del partido se vieron a una Panamá salir con todo, acercándose por los costados, a la vez que Costa Rica se acomodaba, examinaba lo que hacía Panamá, y procuraba defender bien hasta que llegara su momento de ir hacia el frente.
Fue poco lo que tuvo que esperar Costa Rica para tomar ventaja en el partido, encargándose Cristin Granados de enviar un buen servicio al área chica, proveniente de un saque de esquina, apareciendo Raquel Rodríguez para anotar con un cabezazo que pasó cerca de Yenith Bailey, quien no pudo reaccionar bien al remate, por la distancia, y la facilidad con la que apareció la rematadora.
Ese descuido de marca volvió a notarse más adelante en otra jugada de saque de esquina, pero que no acabaría en gol.
Luego al 25’, en un contragolpe, Panamá quedó desordenado en defensa, y Priscilla Chinchilla pudo ganar un despeje corto dentro del área, proteger el esférico, y cederlo hacia María Paula Salas, quien se acomodó para su pierna derecha y pudo sacar un disparo que terminó en la base del poste derecho, donde no pudo alcanzar Yenith Bailey.
Un 2-0 parcial que apagó al equipo panameño, no era el equipo atrevido de los primeros 5 minutos, y se le veía mejor a las costarricenses, desde la forma en cómo salían jugando desde propia cancha.
Quintana fue reubicando a sus atacantes, caso de Kenia Rangel, y de Erika Hernández, cambiándolas de costado, y retrasando más a Marta Cox, mientras que Lineth Cedeño estaba en punta.
Varias veces llegó Cedeño a pisar área, igual Hernández, pero ninguno de sus cruces terminó en posibilidad de remate.
Para el complemento hubo sustituciones esperadas del lado panameño, ingresando Deysiré Salazar, en lugar de María Guevara, y curiosamente 5 minutos después de haberse reanudado las acciones, entraría Hilary Jaén por Kenia Rangel.
Con los cambios no vino una reacción distinta, o podría decirse que la reacción estaba algo demorada, y se complicó más cuando al 58’, una acción en el área chica de Panamá, sería revisada, confirmándose la infracción mediante el VAR, en donde Katherine Castillo resultaría amonestada por un penalti que acabó transformando en gol la capitana costarricense, Katherine Alvarado.
Era goleada faltando 30 minutos por jugar, con un partido que estaba en manos de Costa Rica, quienes con y sin la pelota se vieron superiores a las panameñas que fueron mostrando más falencias conocidas, alejándose de ser un equipo que pudiera competirles a unas costarricenses fortalecidas por sus legionarias, y por la preparación realizada, viéndose que habían estudiado bien a las panameñas.
La poca exigencia que representó Panamá deja en dudas la preparación que tuvieron para esta fase de las eliminatorias en la que se requiere de un nivel más alto para poder aspirar a una clasificación mundialista, y con la experiencia previa de donde proviene la gran mayoría del equipo disponible, la inferioridad que se vio ante Costa Rica deja en claro que hubo carencias que influyen en el rendimiento de las jugadoras.
Costa Rica da un gran paso que las pone cerca de matizar su sueño de regresar a un mundial femenino desde el 2015.
Panamá todavía tiene dos partidos por delante, uno muy complicado y de probabilidades diminutas para poder pensar en sumar ante Canadá, las actuales campeonas olímpicas, candidatas para llevarse este certamen, reafirmándolo con su goleada de 6-0 sobre Trinidad y Tobago, último rival de Panamá en esta fase de grupos, el cual anticipadamente se podría decir que sería al partido que defina el cupo al repechaje intercontinental rumbo al Mundial de Australia-Nueva Zelanda 2023.
Ficha Técnica:
Alineación de Costa Rica (3): 23- Daniela Solera, 3- María Paula Coto, 4- Mariana Benavides, 20- Fabiola Villalobos, 15- Cristin Granados, 8- Daniela Cruz, 16- Katherine Alvarado, 14- Priscilla Chinchilla, 7- Melissa Herrera, 19- María Paula Salas, 11- Raquel Rodríguez. | DT: Amelia Valverde.
Alineación de Panamá (0): 12- Yenith Bailey, 14- Yerenis De León, 16- Rebeca Espinosa, 3- Carina Baltrip-Reyes, 4- Katherine Castillo, 8- Laurie Batista, 15- María Guevara, 10- Marta Cox, 7- Kenia Rangel, 19- Erika Hernández, 19- Lineth Cedeño. | DT: Ignacio Quintana.
Goles | Costa Rica: Raquel Rodríguez (6’), María Paula Salas (24’), Katherine Alvarado (60’).
Amonestadas | Costa Rica: Fabiola Villalobos (90+3’). – Panamá: Katherine Castillo (59’), Lineth Cedeño (79’).
Árbitra: Odette Hamilton.
Incidencias: Partido correspondiente a la Concacaf W Championship, disputado en el estadio BBVA.
Por: Samuel McCollin – Redacción Bitácora Deportiva | Twitter: @SamuelMcCollin
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