Anfitrión, invitado, aspirante y Campeón del Caribe

Anfitrión, invitado, aspirante y Campeón del Caribe

(Imágenes capturadas por Ángel Pimentel – @angelgadir)

Serie del Caribe – Juego Final | Cuba (Leñadores de Las Tunas) 1-3 Panamá (Toros de Herrera)

Inolvidable y casi que indescriptible lo que aconteció en Panamá, durante 7 días albergando a modo de urgencia, lo que fue la 61ra edición del torneo cumbre del béisbol profesional Latinoamericano, la Serie del Caribe, en la que Panamá, representado por los Toros de Herrera, se consagró campeón.

Esta imperdible oportunidad fue reconocida por la afición panameña, que en los duelos anteriores no se había presentado a gran número como se hubiera esperado, sabiendo la magnitud del torneo, pero en esta ocasión era un horario favorable, con un domingo de sol de verano, donde Panamá se enfrentaba a uno de los rivales más difíciles que ha tenido en cualquier categoría del béisbol, Cuba.

Era el partido entre los invitados, los que en el papel no figuraban entre los favoritos, los que tampoco consideraban como aspirantes a algún lugar en el podio, sin embargo, los números que registraron en general, les sirvieron para citarse en el duelo decisivo.

Harold Arauz, lanzador prospecto de los Philadelphia Phillies, era el encargado de salir a lanzar por el equipo panameño en esta final, y por parte del equipo cubano, era Freddy Álvarez.

El panameño Harold Arauz dio 5 buenas entradas, sin permitir carreras en las primeras 4, demostrando mucha concentración a la hora de lanzar ante la peligrosa ofensiva cubana.

El equipo panameño le complicó la tarde a Álvarez desde temprano, anotándole dos carreras en la parte baja de la primera entrada, aprovechando el bocatoreño, Allen Córdoba, conectando imparable para que anotara el nicaragüense, Jilton Calderón estaba en segunda tras un doblete.

(Imagen tomada por Ángel Pimentel – @angelgadir)

 

La segunda carrera de Panamá, vino posterior al robo de Córdoba en 3ra base, encargándose el nicaragüense, Elmer Reyes de conectar sencillo hacia el jardín derecho, permitiendo la carrera de Córdoba, con la que se animaba la tumultuosa afición local en el Rod Carew.

Los cubanos responderían en la quinta entrada, cuando con dos outs, uno de los bateadores más peligrosos de los Leñadores de Las Tunas, Alfredo Despaigne, le conectó doblete a Arauz, y luego Carlos Benítez con un contacto de hit que dio hasta el jardín central, permitió la anotación de Despaigne.

Arauz tuvo la visita monticular, luego Cuba tuvo corredores en tercera y segunda, sin embargo, Arauz saldría del problema haciendo que el emergente, Daniel Castor, bateara para un elevado hacia primera base.

Era el turno para que los relevistas de los Toros de Herrera hicieran el trabajo, en manos del coclesano Anfernee Benítez, que trabajó una entrada, y el dominicano Luis Mateo, manteniendo a Panamá en ventaja.

Panamá pudo alejarse un poquito en la baja de la séptima entrada, cuando con dos outs, Jonathan Gálvez conectaría doblete, siendo todo para el abridor Freddy Álvarez, que sería reemplazado por Vladimir García, a quien el chiricano, Rodrigo Vigil le conectaría imparable para que anotara el dominicano Gálvez, desde la segunda base, poniendo a Panamá en ventaja de dos carreras.

(Imagen tomada por Ángel Pimentel – @angelgadir)

 

Luis Mateó no tuvo problemas en la octava entrada, preparando todo para que Manuel Corpas se encargara de cerrar como lo hizo en los tres juegos anteriores salvados, esta vez para un salvamento de oro, que tuvo su pequeño momento de suspenso, cuando Yurien Vizcaíno le conectó doblete, teniendo dos outs, y llegaría el turno del peligroso Alfredo Despaigne, al que Corpas pudo dominar haciendo que bateara un elevado al jardín central, estando listo Rodrigo Orozoc para atrapar el out 27, el cual estuvo iluminado por los miles de celulares que quisieron captar ese momento épico, histórico, con el cual Panamá volvería a ser campeón de una Serie del Caribe.

Harold Arauz se terminó llevando la victoria, su segundo triunfo en esta serie; Manuel Corpas se llevó su cuarto salvamento en esta serie

Para el cubano Freddy Alvarez fue su segunda de esta serie.

Este equipo panameño, con solo dos años de existencia, escribió una de las historias más grandes del deporte panameño, y a nivel profesional, quedará como una de las mejores hazañas deportivas panameñas, saliendo de lo poco conocido, a ser lo más comentado, lo más hablado, por parte del corazón del béisbol en el continente americano.

El herrerano, Manuel Rodríguez junto a su cuerpo técnico, supo guiar a este grupo integrado por peloteros panameños, prospectos panameños firmados por Grandes Ligas, también prospectos extranjeros, y jugadores extranjeros, provenientes de Cuba, Nicaragua, República Dominicana, Venezuela, e Italia, conformando este grupo exitoso, culminando con un final feliz, esta Serie del Caribe 2019.

(Imagen tomada por Ángel Pimentel – @angelgadir)

 

Mejores en ofensiva por Toros de Herrera (Panamá):

Rodrigo Vigil: 3-2, con una carrera empujada.
Allen Córdoba: 3-1, con una carrera empujada y una anotada.
Elmer Reyes: 3-1, con una carrera empujada.

Mejores en ofensiva por los Leñadores de Las Tunas (Cuba):

Carlos Benítez: 3-1, con una carrera empujada.
Alfredo Despaigne: 4-2, con una carrera anotada.

(Imagen tomada por Ángel Pimentel – @angelgadir)

 
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Por: Samuel McCollin – Redacción Bitácora Deportiva | Twitter: @SamuelMcCollin

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